entorno espectacular, rutas de senderismo recomendadas, encantadores perros

Increíble cómo se olvidaron de traernos toallas a pesar de pedirlas varias veces!!! También, ¡qué pena que las cortinas de la bañera estaban llenas de moho!!! Y el problema del agua caliente no debería haberse ocultado al llegar. ¡Esos detalles hacen la diferencia!!!

El lugar es encantador, ideal para desconectar, el sonido del río es relajante. La calefacción en la habitación no funcionó bien por la noche, y la limpieza podría mejorar.

El ambiente acogedor junto al río y el sonido del agua hacen que sea un lugar mágico para desconectar. La atención de Rubén y Andra te hace sentir como en casa.

La limpieza de la habitación dejaba mucho que desear, ya que encontramos manchas en las sábanas y el baño sólo contaba con un jabón de manos.

Trato encantador
Comida deliciosa

Falta de calefacción
Limpieza deficiente

Recomendado para los que buscan desconectar

La ubicación junto al río es perfecta para dar paseos, y la comida en el bar era realmente buena. Los dueños son super amables, hacen que te sientas como en casa. me encantó la chimenea con los leños grandes, crea un ambiente muy acogedor.

No fue barato, pero a pesar de eso, lo valió la pena.

Encantador lugar, ideal si buscas una escapada llena de paisajes impresionantes y comidas caseras exquisitas que realmente resaltan la calidad y frescura de los ingredientes.

Qué delicia de lugar! La comida estaba para chuparse los dedos, especialmente los filetes que se deshacen en la boca. Además, el trato de Rubén y Andra fue excepcional. de verdad te hacen sentir como parte de la familia. Y no puedo dejar de mencionar lo mágico que es estar cerca del río, un lugar donde los peques y los adultos pueden explorar y disfrutar al máximo.

Bueno, no hay aire acondicionado, pero para qué, si la frescura de la noche hace que sea un sueño dormir ahí. Con el bello entorno, ni te acuerdas de eso. Además, desde la chimenea, todo tiene un toque acogedor.

La ubicación del hostal es impresionante, rodeada de naturaleza y con un río que suena de fondo, ideal para desconectar. La chimenea en el bar crea un ambiente acogedor, perfecto para relajarse después de un día de senderismo. disfrutamos del desayuno (aunque llegó tarde) que consistía en tostadas con aceite o mermelada y café. La amabilidad de Andra y la atención de su hijo, Gabi, realmente hicieron que nos sintiéramos como en casa.

Sin embargo, hubo aspectos que dejaron que desear. La calefacción solo funcionó por la noche, y por la mañana hizo frío al despertar. Además, la limpieza de la habitación no fue adecuada, encontramos algunas manchas en las sábanas y solo había un jabón en el baño. Esto podría mejorar considerablemente.

La comida casera que prepararon fue increíble, especialmente el estofado que me dejaba con ganas de más. Aunque no pudimos disfrutar del desayuno incluido porque el salón estaba cerrado a la mañana, el ambiente acogedor y la chimenea hicieron que la estancia fuera muy placentera. Recomiendo disfrutar de la buena música y relajarse al lado del riachuelo, ¡es un lugar que invita a volver! 😊

La atención del personal fue excepcional, creando un ambiente familiar. La comida fue deliciosa, especialmente los sabores caseros que nos dejaron encantados.

La calefacción funcionaba solo por la noche y la limpieza podría mejorar un poco.

maravilloso lugar para desconectar donde te sientes en casa y disfrutas de la comida junto al río

Un lugar hermoso y acogedor junto al río que te invita a relajarte y disfrutar de cada momento. La atención de los dueños es especial y la comida, simplemente deliciosa.

La habitación tenía un buen edredón que mantenía el calor durante la noche, lo que hizo las noches más cómodas. Sin embargo, la calefacción solo funcionaba en la noche y la falta de toallas grandes fue un inconveniente. El costo de las cenas fue algo elevado, pero entiendo que en una zona aislada este es un aspecto normal. En general, tuvo sus altibajos.

El lugar es increíble. La comida es fresca y deliciosa. La atención de los dueños es excepcional y te hacen sentir como en casa. El sonido del río es muy relajante, ideal para desconectar. Un sitio perfecto para disfrutar de la naturaleza y el buen comer. 😊

El edredón en la habitación es bastante cómodo y mantiene bien el calor. La chimenea en el comedor proporciona un ambiente acogedor para desayunar, especialmente cuando el clima afuera es frío.

La calefacción en la habitación no funcionaba adecuadamente durante la noche, lo que resultó en una experiencia fresca al despertar. La limpieza dejaba que desear, con sábanas manchadas y un baño que solo contaba con un jabón de manos. Tampoco pudimos disfrutar del desayuno incluido porque el salón estaba cerrado cuando nos despertamos.